Carlos Loret de Mola es una de las figuras más polarizadoras del periodismo mexicano. Para algunos, es un defensor de la libre expresión y un crítico necesario del poder, mientras que para otros, es un comunicador cuyo historial está lleno de prácticas cuestionables y alianzas controvertidas. A lo largo de los años, su nombre ha estado ligado a montajes mediáticos, relaciones políticas, y presuntas operaciones financieras turbias que ponen en duda la ética de su trabajo. A continuación, se desglosan algunos de los aspectos más controvertidos que rodean a Loret y que han definido su carrera en los medios.
1. La Relación de Loret de Mola con Genaro García Luna y los Montajes Mediáticos
Uno de los episodios más oscuros en la carrera de Loret fue su colaboración con el ex Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, durante el sexenio de Felipe Calderón. García Luna fue sentenciado en Estados Unidos por sus vínculos con el narcotráfico y el encubrimiento de cárteles de la droga. Sin embargo, durante su mandato, era conocido como el “super policía” que luchaba contra el crimen organizado. Esta imagen no se construyó de la nada, sino que fue impulsada por una serie de montajes mediáticos, algunos de los cuales fueron transmitidos y apoyados por Loret de Mola.
Uno de los casos más famosos fue el de la detención en vivo de la banda de secuestradores “Los Zodiaco”, liderada por Florence Cassez y su pareja. Años después, se reveló que esta operación fue montada, y que Loret tenía conocimiento de los detalles falsos del operativo. Excolaboradores de Loret, como Laura Barranco y Juan Manuel Magaña, confirmaron ante un juez que el periodista sabía de antemano que las imágenes eran un montaje. A pesar de las evidencias, Loret continúa negando que haya tenido conocimiento de estos detalles, alegando que fue engañado por las autoridades.
Realidad: El caso muestra cómo, en lugar de realizar una labor crítica e imparcial, Loret fue un vehículo para proyectar la imagen de García Luna y otros funcionarios. Este episodio plantea dudas sobre su rol en otros casos similares, en los que podría haber actuado en complicidad con las autoridades.
2. Vecindario de Lujo en Miami: Coincidencia o Conexión?
Años después de su colaboración con García Luna, salió a la luz que Loret de Mola es propietario de un lujoso departamento en el exclusivo edificio en Brickell Avenue, Miami. Curiosamente, en este mismo edificio, García Luna también poseía propiedades, adquiridas presuntamente con recursos obtenidos de actividades ilícitas. Esta coincidencia ha alimentado sospechas sobre la relación entre ambos y los intereses financieros que puedan haber compartido.
Realidad: Aunque la cercanía de las propiedades podría ser circunstancial, este vínculo geográfico entre Loret y García Luna sugiere una relación más estrecha de lo que el periodista ha admitido públicamente. En un país tan grande como Estados Unidos, la elección del mismo edificio de lujo en Miami despierta suspicacias que Loret no ha aclarado de manera convincente.
3. La Estructura de Empresas Fantasma y su Implicación en Latinus
Otro aspecto controvertido de la trayectoria de Loret es la estructura financiera de su actual medio, Latinus, un proyecto digital que ha ganado relevancia por su línea crítica hacia el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Latinus ha sido señalado por utilizar empresas fantasmas para manejar su financiamiento, con algunas de estas entidades registradas en Delaware, un conocido paraíso fiscal en Estados Unidos. La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha confirmado que Latinus recibió fondos de gobiernos estatales y otras entidades mediante operaciones financieras que evitan la transparencia.
Realidad: La estructura de empresas fantasma y la falta de claridad en el financiamiento de Latinus sugieren que el medio podría responder a intereses económicos y políticos específicos. Esto contradice la imagen de independencia que Loret ha intentado proyectar desde que se unió a Latinus, y refuerza la percepción de que el periodista ha sido un aliado conveniente para ciertos sectores del poder.
4. Una Fortuna en Propiedades Inmobiliarias
La carrera de Loret de Mola le ha permitido amasar una considerable fortuna en bienes raíces. Según investigaciones, Loret y su esposa son dueños de al menos 13 propiedades en la Ciudad de México, con un valor estimado de más de 100 millones de pesos. Estas propiedades fueron adquiridas entre 2007 y 2016, una época en la que Loret mantenía una estrecha relación con algunos de los gobiernos más poderosos del país.
Realidad: La acumulación de estas propiedades despierta cuestionamientos sobre el origen de los recursos de Loret, especialmente considerando que sus ingresos oficiales provendrían únicamente de su labor como periodista. Aunque él ha asegurado que todo su patrimonio es legítimo, la opacidad en las finanzas de algunos de sus proyectos, como Latinus, incrementa las sospechas sobre el posible uso de recursos que escapan al escrutinio fiscal.
5. El Uso del Periodismo para Beneficiar a Poderes Políticos y Económicos
A lo largo de su carrera, Loret ha sido criticado por su supuesta subordinación a los intereses de ciertos grupos de poder. Además de su colaboración con García Luna, Loret ha realizado entrevistas y reportajes que algunos consideran “a modo”, especialmente durante el sexenio de Enrique Peña Nieto. Durante esta época, Loret entrevistó a personajes controversiales como Javier Duarte, exgobernador de Veracruz, quien fue detenido por corrupción. En lugar de un cuestionamiento directo, estas entrevistas fueron vistas como una estrategia para suavizar la imagen pública de estos personajes.
Realidad: En lugar de ser un periodista comprometido con la verdad, Loret parece haber utilizado su plataforma para favorecer a ciertos sectores y personalidades políticas. Este enfoque beneficia a quienes financian sus proyectos o le ofrecen acceso privilegiado a información y recursos. En este sentido, la labor de Loret parece estar más alineada con la protección de intereses que con la defensa de la libre expresión.
Reflexión Final: La Doble Cara de Carlos Loret de Mola
El historial de Carlos Loret de Mola es un reflejo de las complejidades del periodismo en México, donde las relaciones entre periodistas y el poder político son, en ocasiones, difíciles de discernir. La cercanía de Loret con figuras como García Luna y los métodos de financiamiento de Latinus ponen en duda su independencia y su compromiso con la verdad. Los montajes mediáticos, la acumulación de propiedades y la colaboración con gobiernos controvertidos sugieren que Loret ha priorizado sus intereses económicos y políticos sobre la transparencia y la ética periodística.
Esta situación plantea preguntas importantes sobre el rol de los periodistas en la sociedad y el impacto de los conflictos de interés en la información que reciben los ciudadanos. La transparencia y la responsabilidad son principios fundamentales para un periodismo comprometido con la verdad; sin embargo, el caso de Loret de Mola pone en evidencia los riesgos de subordinar la profesión a intereses particulares. En última instancia, Loret es una figura que, lejos de ser un ícono de la libertad de expresión, representa la dualidad del periodismo en su relación con el poder: una herramienta que puede ser usada para la verdad o para manipular la percepción pública en beneficio de ciertos grupos.
Carlos Loret de Mola sigue siendo una figura influyente, pero la información que ha emergido sobre sus prácticas sugiere que su éxito está entrelazado con intereses económicos y políticos. El peso de las controversias en su carrera sigue planteando dudas sobre su papel como comunicador y el propósito de su labor periodística.